Han transcurrido varios años en que avizoráramos la profunda y peligrosa crisis de desintegración social que hoy en día abate a Venezuela desde nuestra posición en la ya desaparecida asociación –ASOIFA- y después desde mi punto personal como sacerdote mayor en IFA. Las alertas, orientaciones y proposiciones que fueran recomendadas fueran totalmente desoídas y desconocidas generalmente por los diferentes sectores componentes de la sociedad venezolana.

Ya sumidos en la vorágine en que estamos, debemos de recordar y tener en cuenta que para salir de esta grave y penosa situación se requiere del aporte generalizado y desinteresados de todos los componentes de nuestro gran conglomerado social. Estamos a las puertas de una guerra civil entre hermanos; por lo tanto exige por parte de TODOS: Tolerancia, entendimiento, respeto mutuo comprensión y amor.

TOLERANCIA, para ser capaces de aceptar opiniones y posiciones opuestas a las nuestras.

ENTENDIMIENTO, para establecer y cumplimentar acuerdos entre todas las partes.

RESPETO MUTUO, para no denigrar las actitudes distintas a las que comulguemos.

COMPRENSIÓN, para aceptar con firmeza en nuestras conciencias el conocimiento de la existencia de conceptos discrepantes a los nuestros.

AMOR, para no ver como enemigos a nuestros opositores y si como adversarios, porque al aplicar los puntos señalados anteriormente estamos imbuidos del concepto de AMAR AL PRÓJIMO igual a como nos amamos nosotros mismos.

Hago este llamado para que todos juntos SALVEMOS A VENEZUELA.